Antes las cosas eran sencillas
Tu me querías y yo te quería,
Tu bailabas y yo disfrutaba
Yo ordenaba los píes y tu te alegrabas.
Los brillos estaban,
pero no importaban.
Importaba más que brillasen nuestros ojos,
ahora brillan con lágrimas.
Al menos los míos.
Antes nos reíamos,
de cosas livianas, de cosas importantes.
Ahora casi no hay livianas,
las importantes casi siempre son serias.
Hay momentos en que parece que nos encontramos,
y pronto se esfuman entre palabras no dichas,
entre tensiones no habladas.
No puedo negar lo que siento,
me duele.
Pero lo haré por ese extraño equilibro,
por esa necesidad que comienzo a respetar.
Me iré con poco ruido,
espero que cumpla una función,
imagino que la de dejar unión.
Desde fuera del círculo ya,
con miedo por lo que veo,
con millones de preguntas que sin respuesta quedarán.
Con mucho amor estoy y estaré,
con mucho amor y el corazón muy triste me iré.