Sube, sujétame fuerte, agarra mi mano, nos vamos de viaje.
Viajamos hacia adentro, hacia la esencia, el impulso de la vida.
Desde dentro, desde las luces y las sombras, comienza la aventura de crecer.
Valoremos el peso, quizá haya muchas cosas que no necesitamos llevar con nosotros.
Llevamos amor, esperanza, llanto y sonrisas.
Botiquín de abrazos y buenos corazones con los que nos hemos preparado para esta salida.
Ilusión que hemos plantado y regado cada día.
Nada más, tenemos todo.
Billete hacia uno/a mismo/a.
Dispuesto a encontrarme con fantasmas y ángeles.
Con oscuridad y luz.
Con la vida.
Se quedan esperando cambios maravillosos, sonrisas sinceras y abrazos de alma.
Raro momento para partir, pero de alguna manera se parte también hacia lo que aquí queda, tomando distancia de la parte física para conectar con la que late, respira y tiembla de emoción.