¿Por qué no amar?
Mientras nos miramos y tratamos de perfeccionar por fuera se nos suele olvidar ese gran detalle de regar el amor que ha de brotar dentro de nosotros/as.
¿Para qué quiero el éxito si he fracasado en mi amor propio?
Nada tendrá valor, nada será suficiente si no me quiero a mi.
Y, ¿que soy yo?
Esa idea egocéntrica del "yo mismo como centro del universo", no termina de funcionar bien. No estoy solo/a, aislado, soy parte de "algo más".
Yo soy mi cuerpo, mi mente y todo lo que me rodea.
Soy la energía que emana de mi y la que recibo de mi entorno.
Soy lo que me provoca un bello atardecer, la sensación de la tierra bajo mis pies, el movimiento en el corazón cuando recibo una sonrisa, una cara de enfado...
Soy lo que provoco y lo que me dejo provocar.
Si doy amor, recibo amor, y seré más feliz como persona que ama y que es amada.
Puedo amar a la naturaleza, ella me regalará preciosas imágenes, olores, sensaciones, que a la vez me devolverán amor.
Puedo amar a las personas y seré amado por ellas y ese sentimiento formará parte de mi.
Ama y serás amado/a.
Y ese círculo de amor serás tu, será tu identidad. Ese si eres tu, si soy yo, somos nosotros.
